Su frescura y simpatía convierten a Nicole Kidman en una habitual en las listas de mejor vestidas de las entregas de premios. La actriz derrocha elegancia con un toque muy personal. Sabe elegir los vestidos que estilizan su esbelta figura y que realzan sus curvas, potenciando su sensualidad, y a la vez, su naturalidad. La hemos visto en tonos rojos, azulados, rosados con modelos cortos y largos, pero en pocas ocasiones viste de color negro.
En su look destaca su larga melena rubia y lisa y un discreto maquillaje en tonos rosados, pero se encuentra igual de radiante con todo lo contrario: una melena pelirroja y rizada. Sea como sea, Kidman siempre da una lección de estilismo en cualquier alfombra que pisa.
Como no podía ser de otro modo, la actriz fue una de las más distinguidas de la última edición de los Globos de Oro. Pero lo que hacía especial su look, esta vez, era su significado. La australiana se sumó al movimiento en contra de los abusos sexuales vistiendo un precioso vestido color negro. Aunque no solo fue lo que llevaba, sino que también nos emocionó con sus palabras sobre el poder de las mujeres como colectivo. ¿Nos sorprenderá Nicole Kidman otra vez en los Oscars siguiendo, de algún modo, la reivindicación que empezó en los Globos de Oro?
